Inauguración Singlot Festival | Keyfotu
Se cuenta que, en la primera mitad del siglo XV, un marino portugués, tras regresar de un recorrido por la costa africana, pidió audiencia con el infante Don Henrique y le dijo al término de las oportunas reverencias: "Señor, con el debido respeto, lo hemos encontrado todo al revés de cómo decían los mapas". Los que asistimos boquiabiertos ayer al arranque del Singlot Festival nos sentimos igual que se sintió Don Henrique hace seiscientos años, siendo los marinos portugueses en este caso dos viajeros tan dispares y tan (poco) de fiar como Darío Adanti y Leo Bassi. Eso sí, si el súbdito luso puso por delante el aviso “con el debido respeto” a sabiendas de lo poco que le suelen gustar a las figuras reales que las cosas no se ajusten a lo que ellos habían previsto, Adanti y Bassi nos contaron que en el humor todo está al revés de como dicen los mapas, pero nos lo contaron sin el menor respeto —que es como hay que contar estas noticias—, nos soltaron un par de buenos bofetones demostrando que en el buen gusto también lo estamos encontrando todo al revés de como dicen los mapas. La hostia también es el mensaje, apostillamos a McLuhan.

Darío Adanti | Keyfotu
Darío Adanti, solo frente a un micrófono y rodeado de cientos de espectadores que no sabían cuánto podían acercarse a él, (pro)clamó con la solemnidad de los temerarios algunas de las sentencias más inteligentes sobre la risa que se han escuchado en la era postCharlie Hebdo y posttuits de Zapata. Leo Bassi, a continuación, demostró lo rápido que puede llegar a moverse un hombre corpulento y, armado con cocacola, espuma de afeitar y plumas, puso en práctica una tesis doctoral sobre el humor tras la cual nada debería seguir como hasta ahora en el mundo de la comedia. Darío Adanti habló de asesinaditas mexicanas, reos que van a ser ajusticiados y abuelos que se entretienen con moscas en el lecho de muerte. Leo Bassi, a continuación, jugó con quince espectadores muertos. Darío Adanti provocó una euforia colectiva (¡viva Darío Adanti!). Leo Bassi, a continuación, demostró que la euforia colectiva es un buen punto de partida para llegar al éxtasis colectivo y conseguir que un auditorio entero siga a un payaso emplumado por las calles de Sant Feliu.

Leo Bassi | Xavier Casals
¿Quién dijo "el arte es necesario, pero no sé para qué"? ¿Dalí, Miró, Picasso? ¿Darío Adanti, Leo Bassi? ¿Sabe más de la luna el poeta o el astrónomo? Todas las actividades humanas son mejor practicadas por aquellas personas que las estudian e investigan, las que intentan desentrañar sus procesos y mecanismos. Todas menos el humor. Ay del que lo intente analizar. En el humor todo está al revés de como dicen los mapas. Pero no porque los mapas estén mal, como le ocurría a Dom Henrique, sino porque los mapas son mapas. Denle la vuelta a los mapas y el humor seguirá estando del revés. Y esto se entiende o no se entiende o las dos cosas a la vez. “En un mundo ordenado, el cómico debe ser desordenado. En un mundo desordenado, el cómico debe ser ordenado. En un mundo cruel y agresivo, el cómico debe ser dulce”. Y, tras decir esto, Leo Bassi se tiró sobre su cuerpo desnudo tres litros de miel.

Dicho de otra manera, nadie sabe nada.

Antonio Rico | @ARicoTV
Enviado especial a Singlot Festival

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